En esta jornada de la Agenda Cultural el Castillete de Oro Juan Mari Arzak ha visitado el Museo del Cante de las Minas y el nuevo Museo Minero.
El Salón de Actos de la Casa del Piñón ha acogido la presentación del libro “Estudios Flamencos para instrumentos melódicos” a cargo de su autor Oscar de Manuel, Premio Filón en la 52 Edición del Festival Internacional Cante de las Minas, acompañado del Teniente de Alcalde de Cultura de La Unión y Director del Festival Internacional Cante de las Minas, Julio García Cegarra.
En la presentación, el investigador Oscar de Manuel, ha expuesto que “la base de esta obra es el estudio de instrumentos melódicos cuyo objetivo es transmitir, a través de la metodología, el flamenco a cualquier músico para que pueda ir teniendo los conocimientos básicos”. El libro recoge, además, las aportaciones y la evolución de los instrumentistas melódicos del flamenco en los últimos treinta años.
Por otra parte, en la obra queda transcrita la partitura “Dos estrellas relucientes”, un fandango como memorándum a Camarón. Óscar de Manuel plantea en su libro el nuevo método escala-acorde, un estudio único donde “el músico sabrá en todo momento donde está”.
En el acto, el flautista ha interpretado las posibilidades que proyecta su libro mediante las metodologías que propone, mostrando la parte práctica de su obra con una actuación en directo de flauta travesera y acompañamiento de guitarra, porque para él “la metodología está hecha para llegar al oyente” y así lo ha transmitido mediante tanguillos, fandangos y bulerías.
Ha querido agradecer a la Fundación Cante de las Minas la oportunidad brindada para presentar su nuevo proyecto. Un trabajo con una espectacular investigación y dedicación que ha dado como resultado a lo que él llama “su vida”.
Por otro lado, tras recibir ayer el Castillete de Oro del Festival Internacional del Cante de las Minas, el cocinero Juan Mari Arzak ha visitado esta mañana el Museo del Cante de las Minas y el Museo Minero de La Unión, ciudad que, tal y como ha reconocido, “me ha dejado impresionado, al igual que su mágica mina, así como la actuación de Encarnación Fernández con Antonio Muñoz”. Por ello, siente que “El Castillete de Oro es de los reconocimientos que más me han transmitido, porque el flamenco siempre me ha impactado y cuando veo a un flamenco pienso que hacen lo mismo que nosotros porque tenemos una gran sensibilidad y nos permite interactuar con las personas”.
En cuanto al fenómeno de la internacionalización del flamenco y la gastronomía ha afirmado que siempre “ha existido la paella, el gazpacho o la tortilla pero no se conocían en el mundo y, después, empezamos con la nueva cocina vasca y la cocina de evolución y esto ha hecho que nos pongamos líderes en el mundo y sea conocida nuestra gastronomía, pero eso arrastra a todo lo demás, como al flamenco, ambas cosas están interrelacionadas y van unidas de la mano”. Asimismo, ha querido distinguir, en relación a la aportación de la cocina a la sociedad, “entre la cocina como primera necesidad vital y la cocina como sublimación de sentidos, al igual que la música y, en concreto, el flamenco”.
Sobre las sensaciones que le transmitió el acto de entrega del Castillete de Oro, Arzak ha afirmado que “me quedé encantado con la performance, es la primera vez que me hacen algo así, me sentí como en casa, además de que me encantan los juguetes, porque soy coleccionista”. En referencia a la performance preparada en la que se podía ver una maqueta a escala de la guipuzcoana playa de La Concha sobre la que preparó un plato el cocinero Pablo González-Conejero.